Fórmula breve de consagración diaria

La siguiente oración se encuentra tomada de una edición del Tratado de la Verdadera Devoción de San Luis Maria Grignon de Montfort, la cual permite renovar diariamente ya sea que se haya efectuado la Consagración a la Santísima Virgen María siguiendo el método descrito en el libro o bien sin haberse realizado la misma.

De esta manera, nos permite renovar aquellas disposiciones interiores para de ese modo recordar que el consagrado a nuestra Madre desde el rol del laico continúa ofreciéndose y eligiendo diariamente a María como medianera y administradora de nuestras obras, gracias y bendiciones según la Divina Sabiduría.

¡Oh María Inmaculada, buenísima soberana mía, cómo me regocijo en ser vuestro esclavo de Amor!

Os entrego y consagro mi cuerpo y mi alma con todos bienes interiores y exteriores, naturales y sobrenaturales, pasados, presentes y futuros.

Quiero también en este día ganar cuantas indulgencias pueda y os las entrego.

¡Mi queridísima Madre! Renuncio a mi propia voluntad, a mis pecados, disposiciones e intenciones; quiero lo que vos quereis; me arrojo en vuestro corazón abrasado de amor, divino molde en el que debo formarme y en Él me escondo y me pierdo para rogar, obrar y sufrir siempre por Vos, con Vos y en Vos para la mayor gloria de Vuestro Divino Hijo Jesús.

Amén.

Fuente: de Montfort, L.M.G (2022). Tratado Sobre la Verdadera Devoción a la Santísima Virgen (Traducción) (J. de la Sierra, Trad.) Independently Published.